POSTHUMANISMO EN EL ARTE I: LA TENDENCIA CYBORG
Para muchas personas, ciertos implantes o las extensiones del cuerpo robotizadas implican una mejora sustantiva en su calidad de vida. Sin embargo, estas situaciones advierten un cambio de paradigma profundo. Y es que, detrás de este avance para la ciencia hay visiones trascendentales que podrían llevar a un cambio definitivo en la comprensión que tenemos acerca del ser humano. Bjork, Arca, Harbinsson y Salvia son algunos artistas que viven o se inspiran en los circuitos.
Un cyborg, según la Real Academia Española, es un “ser formado por materia viva y dispositivos electrónicos”. Por otro lado, en el sitio web de la “Cyborg Foundation” destacan en grande las frases “diséñate a ti mismo” y “nosotros somos la primera generación capaz de decidir qué órganos y sensaciones queremos tener”. Esta colectividad co-creada por Neil Harbisson, primer humano considerado cyborg por un gobierno (Inglaterra) en el mundo, expone la declaración de los derechos cíborg y crea el término “realidad revelada”. Sobre este concepto la “Cyborg Foundation” precisa: “experimentamos el mundo a través de nuestros sentidos, por lo que, creando nuevos sentidos, nuestra experiencia de realidad cambia y se hace más profunda”.
Harbisson, con la ayuda de una antena implantada en su cráneo, percibe ondas infrarrojas, ultravioletas e imágenes del espacio y obtiene, además, una percepción del mundo que va más allá de lo natural. De este modo, pasó de ver imágenes en escala de grises a ser capaz de percibir y pintar en colores gracias a esta extensión tecnológica. La historia de Harbisson y su reconocimiento mediático ha sido un fuerte hito que posiciona con más fuerza el tema “cyborg” en el ámbito civil; a pesar de que este asunto ha estado presente en el mundo del arte desde hace décadas. Por mencionar un conocido ejemplo, El hombre bicentenario (1999) de Chris Columbus, quien planteó el asunto de la inmortalidad y por primera vez la transformación de un robot a un ser humano, en una historia que deja abierta la puerta a un posible derribamiento entre los límites de la humanidad y la robótica como conceptos totalmente lejanos. Al final, el protagonista, un robot (Andrew), exige a su dueño emanciparse (y por ende su libertad).
A mediados de 1999, Björk realiza el videoclip de la canción “All is full of love” del álbum Homogenic (1997), donde dos robots de apariencia femenina presentan una escena erótica. La canción que fue nominada a los premios Grammy ese mismo año estuvo en la lista de las diez más escuchadas en Estados Unidos y en Reino Unido. A este respecto Chris Cunningham, director del video, sostuvo: “Aún con las características de Björk, las dos inteligencias artificiales comienzan a interactuar entre sí”. De esta forma, corrobora que las facciones de los robots son de la cantante, sincerando que tanto él como Björk deseaban que fuese como “el Kamasutra conociendo la industria robótica”.
Imágenes del video “Al lis full of love” del Canal de YouTube oficial de Björk.
Aixa Portero y Agustín Linares añaden en la revista Teknokultura que “la ciborgización cuestiona esa normalización de la dicotomía natural/artificial, así como las categorizaciones de género e identidad sexual, abriendo nuevas perspectivas y sentimientos de libertad”.
Esto mismo quiere comunicar el “Drag Queen” Salvia, quien comenzó posando en su Instagram con maquillaje y montaje de imágenes obteniendo 518.000 seguidores. En una entrevista para la Revista Vogue explica que “el nombre de Salvia proviene de la canción ‘Salvia Plath’ de la banda Teen Suicide, y sí, también es un guiño a la droga alucinógena”.
Proveniente del Reino Unido, Salvia intenta crear un relato de ficción en sus publicaciones y transformarse en seres de apariencia alienígena. Pero, además, posó para el fotógrafo Nick Knight en el contexto del proyecto “Infamy” en The Show Studio. Por otro lado, en la revista I-D menciona que uno de sus grandes mentores fue el diseñador Alexander McQueen (quien destaca como colaborador de Björk) y explica lo que piensa de la belleza: “la mayoría de los cuerpos no encajan en el estándar que nos meten con calzador en la cabeza y es importante saber que se puede ser bello existiendo fuera de ese molde”.
Portada del disco KiCk I de Arca.
Otro artista que ha hecho alusión a las temáticas transhumanistas ha sido Alejandra Ghersi, conocido como Arca, quien en su último disco KiCk I colabora con la española Rosalía y Björk. En la portada del disco (ver imagen) presenta una fusión de lo humano con lo robótico. En una entrevista para la revista I-D aseveró que "todos estamos en transición: desde el nacimiento hasta la muerte, es inevitable".
En la canción “Nonbinary” del disco anteriormente mencionado, ARCA hace un guiño a la “Venus” de Sandro Botticelli, obra del maestro italiano ícono del Renacimiento, que representa los mitos de la Antigüedad clásica, los cuales develan verdades de la naturaleza humana. A la figura que estamos acostumbrados a ver la ha incorporado brazos robóticos y rasgos andróginos, demostrando una nueva era de la belleza de acuerdo con los estándares del cantante.
“La principal forma para superar los límites inherentes de la naturaleza humana parece ser justamente el medio tecnológico. De hecho, los transhumanistas enfatizan la necesidad de lograr dicha superación a través del desarrollo tecnológico. En cambio, el punto focal del posthumanismo consiste no tanto en la aceptación acrítica de las posibilidades ofrecidas por la tecnología —tal como sucede con el transhumanismo— sino más bien en una contaminación e hibridación total de los seres humanos con otros seres vivos y con las máquinas”.
Luca Valera y José Tomás Alvarado en “Posthumanismo e hibridación” Instituto de filosofía, Centro de Bioética de la Universidad Católica de Chile.
Revista Individuo entrevistó al cantante chileno Mc Narai, quien se cataloga a sí mismo como anti-artista y que tiene publicados tres discos en Spotify. En su música que va desde el hip-hop, folclore, pasando por el punk y por el pop, reflexiona sobre el concepto de libertad, entre muchos otros temas. Respecto a las corrientes poshumanistas es muy crítico, piensa que ningún artista es ajeno a una ideología en estos tiempos.
¿Crees que los artistas pueden ser neutrales respecto a su ideología?
Jamás. Las filosofías e ideologías en general, sea cuales sean, siempre han influido en las corrientes artísticas, ya que el arte tiene un sentido de búsqueda y retroalimentación metafísica. Siendo el objeto metafísico en sí, el que cambia en cada corriente (Dios, la “Nada”, la locura, el subconsciente, etc.).
Para Narai, quien prefiere ser conocido por su seudónimo, las filosofías que imperan en el terreno de la cultura son las que “componen a la izquierda como sector” y agrega que estas filosofías toman distintas formas, tales como el materialismo, nihilismo, posmodernismo, deconstrucción y también “una forma de adoración a la sobre-emocionalidad que producen las drogas en general, y que son usadas muchas veces como nexo y metodología esotérica”.
Francis Bacon, el famoso pintor y barón irlandés, al crear la obra Estudio del retrato del papa Inocencio X de Velázquez (1953) le dio otra representación a la figura del pontífice. Según expone Leonardo Martínez en su tesis doctoral "De lo demoníaco a lo abyecto" para la Universidad de Pompeu Fabra: “el papa deja de representar la máxima autoridad de lo espiritual en el mundo cristiano, deja de ser transportado en majestad, para quedar reducido a una especie de prisionero”. De igual manera, en la actualidad, los artistas pueden darle otro significado a íconos o figuras que antaño fueron consideradas sagradas. Un ejemplo de ello es el ser humano en sí, el cual desde la mirada poshumanista puede extenderse en capacidades y posibilidades con los recursos que les otorga la tecnología, abandonando así su esencia original.